6 de enero de 2011

Chau Chau Chau...

A veces hace frío fuera y dentro de mí. Pienso que a veces estoy ciega, pero ahora sí puedo darme cuenta de las cosas , porque ciertas cosas me fueron abriendo los ojos de a poco. Quise escaparme un poco de la realidad pensando que todo iba a cambiar con el tiempo, pero el tiempo pasa y al menos que abramos los ojos, todo va a ser una Abrzurdah realidad. Este es un e-mail de despedida. No me voy por una semana o por dos, me voy para siempre, porque se que estoy de más. No me necesitas tanto como yo a vos y muchas veces me dijiste que en las relaciones hay que dar y recibir por igual. Siento que siempre sentí más que vos. Entonces digamos que en nuestra relación no existe un equilibrio. No nos vemos nunca o estamos peleados… Siempre hay un tema para discutir entre nosotros. No tuvimos ni una sola semana de paz. Creo que es importante un poco de relax, creo que llegó el día, ¿no? El tema de vernos más seguido también quedó en la nada. Ya ves: Durante el año te veo (si se te antoja ). Ahora estoy en vacaciones no te voy a ver ni una sola vez. ¿Qué tiempo me dedicas de tu vida? Pusimos tiempos para vernos y hasta promesas que yo misma rompí.

A los dos nos gusta que el otro nos diga cuánto nos quiere, pero ninguno de los dos obtuvo nunca lo que quiso. Nunca fue bastante, no nos alcanzó. Tal vez a vos si te alcanzó, porque no necesitaste nunca verme. Pero no fue suficiente para mí, que te quise con el alma y no podía verte jamás. Tampoco tuviste en cuenta que además de escuchar “Te quieros” hay que demostrarlos. Shakespeare dijo alguna vez: “No ama quien no lo demuestra”. Dejé que vinieras cuando quisieras, que hicieras y deshicieras sin importarte nada de mí.
Tal vez encuentres a alguien a quien ames tanto como te amás a vos mismo y ése va a ser el verdadero amor. La pregunta es: ¿Por qué no me dijiste desde el principio que te habías tomado nuestra relación de otra manera? ¿Por qué no me advertiste? Te hubiera querido menos, te hubiera dado menos importancia. Ahora estoy atada a vos y es un infierno, por eso decido alejarme ahora. Porque si seguimos con esto que no tiene nombre, voy a quererte cada día mucho más y no es eso lo que quiero. Yo nunca te interesé demasiado porque sino hubieras tenido más ganas de verme. Tal vez tantas como yo.
Una relación del pasado.