15 de agosto de 2010

Sin dudas los recuerdos tienen nombre y apellido, tienen fecha y horario. Miles de pensamientos que invaden en mi cabeza y ya no los puedo borrar, porque los vuelvo a encontrar cada día al despertar. Es extraño el pensar que ya llevo medio año así, pensando en vos, recordándote, alagándote. Es tan raro creer que hace un año eras un Dios en mi constelación y hoy sos un desperdicio. Todavía sigo sin creer lo rápido que puede pasar el tiempo, lo poco que tarda en esfumarse un instante del cuál el recuerdo te quedará para siempre. No logro captar lo mucho que te quise, lo tanto que me cuesta olvidar. Un año del cuál saco tantas cosas lindas, sin embargo saco más sufrimiento y dolor que alegrías y éxtasis. Cada recuerdo que me dibuja una sonrisa en la cara, de pronto se torna en sentido opuesto y me genera lágrimas en mis ojos. Porque definitivamente después de cada vez que fui felíz, vinieron un millón de tristezas seguidas, sólo por vos. Y hoy, después de un año, sigo sin entender cómo pude darte tanto espacio para entrar en mi vida. Medio año de una amistad, 3 meses de algo mas que una amistad que jamas llego a ser nada y otros pares de meses que me hicieron necesitarte, extrañarte y alejarme de ti :s.